Bueno chicas, hoy vengo con un post especial de higiene y mantenimiento bucodental, mis seguidoras más fieles os acordaréis de él, ya que lo publiqué hace 2 años y ahora he decidido recordarlo, para que estéis al día......
y ya sabéis que me gusta recomendar cosas, costumbres sanas y vida saludable.
y ya sabéis que me gusta recomendar cosas, costumbres sanas y vida saludable.
No debéis olvidar acudir al dentista una vez al año para una revisión rutinaria, y comprobar que todo está bien..., no debemos ir sólo cuando nos duele algo, eso es un error muy frecuente.
Una
correcta higiene bucodental es imprescindible para tener una buena salud oral y una bonita sonrisa. Para
mantener la boca sana durante toda la vida debemos de tener una buena
alimentación y cepillarnos 3 veces al día, aunque si haces cinco comidas diarias como hago yo..., a lo mejor es necesario cepillarte alguna que otra vez más.
Pasos para un cepillado 10:
- Hay que cepillarse bien cada diente y muela sin olvidar ninguna pieza, insistiendo bien en la superficie y en ambas caras (interna y externa), haciendo movimientos de arriba-abajo, de la encía hacia el diente y circulares.
- No debemos abusar de la intensidad del cepillado, ya que por cepillar más fuerte no vamos hacerlo mejor, y podemos dañar nuestras encías y producir desgaste en los cuellos de los dientes. Una presión media con un cepillo medio/suave es suficiente, y el movimiento debe ser de arriba abajo o circular, y la técnica de barrido desde la encía hacia el diente es muy buena. Es mejor hacerlo más tiempo y con menos fuerza. Entre 2 y 3 minutos. Los cepillos eléctricos de última generación tienen varias velocidades, y evitan que te aprietes en exceso, ya que si lo haces el cepillo se para.
Oral B Triumph |
- Cuando el cepillo esté muy usado, con los filamentos abiertos, debemos cambiarlo, lo recomendable es hacerlo cada 3 meses. Si antes de los 3 meses está muy deformado es que te cepillas en exceso apretando demasiado.
- No debemos ponerle capuchón al cepillo para no deformarlo y que no coja hongos..., es mejor dejarlo limpio y seco en un vaso, y sólo ponerle la capucha cuando te vas de viaje o para llevarlo en el bolso.
- Cuando hayas terminado con todas las piezas dentales sin olvidar ninguna, cepilla la lengua con suavidad, con el mismo cepillo o con un raspador lingual. Puedes comprarlo independiente al cepillo, o puedes incorporarlo al cepillo eléctrico, ya que Oral B tiene como accesorio raspadores linguales.
- Enjuágate bien con agua.
- Pásate el hilo dental entre cada diente y muela con cuidado de no dañar la encía, es la única manera de eliminar restos de comida entre los dientes. Este paso no es obligatorio para todo el mundo, pero es recomendable hacerlo tras el cepillado nocturno y sobre todo si tienes reconstrucciones dentarias o prótesis dentales. Incluso si llevas ortodoncia, implantes o puentes, en estos casos en obligatorio para mantener una boca bien limpia. A mi me gusta usar la cinta dental o seda dental con flúor, ya que el hilo se rompe y se engancha con facilidad.
- Para terminar hay personas que les gusta enjuagarse con algún colutorio (enjuague bucal), pero este paso no es obligatorio, ya que a veces puede ser más perjudicial que beneficioso..., debe ser prescrito por tu dentista, y no abusar de ellos. En los casos de gingivitis es bueno usar clorhexidina, (pero no más de 15 días seguidos, y seguir las recomendaciones del especialista), en casos de sensibilidad dentaria hay enjueagues específicos, y cuando es necesario un aporte extra de flúor, (como es el caso de los niños) también debe ser prescrito por el dentista.
Para los adultos con sensibilidad dental estas son las pastas que recomiendo. |
La higiene bucal debe estar dirigida al control y la eliminación de la placa dental. La higiene de nuestra boca se basa en el cepillado de los dientes, pero también en el uso del hilo o seda dental. Si sólo cepillamos los dientes, tan sólo llegamos al 60% de la superficie total de nuestra dentadura. Este paso es básico en nuestra rutina diaria y es además la segunda vía de prevención más importante de la caries y la gingivitis.
Los restos de comida provocan un ambiente ideal para que crezcan bacterias en la boca que podrían crear mal aliento y posibles infecciones en las encías. Sólo con el cepillado habitual de los dientes, sin aplicar ningún tipo de limpieza interdental, estaríamos dejando más de la mitad de la superficie dental expuesta a esta posibilidad de infecciones, y por tanto nuestro cuidado oral resulta insuficiente para tener una boca sana y con una buena apariencia.
"El
42% de las personas sabe que tiene que lavarse entre los dientes, es
consciente de ello, pero en la práctica solo un 12% lo hace", afirma el
doctor Germán Gómez, de la Sociedad Europea de Odontología Estética
(European Society of Esthetic Dentistry, ESED).
Los dentistas recomiendan que la limpieza interdental
debe formar parte indivisible de nuestra rutina a la hora de limpiar
nuestros dientes. Y debemos romper algunos miedos sobre ello.
Las
encías sangran cuando están inflamadas. Su apariencia es rojiza y al
tocarlas, bien con el hilo dental o con otro dispositivo de limpieza interdental, pueden sangrar. Pero no hay que tener miedo al sangrado, si te ocurre a menudo acude al dentista y consulta tu problema.
El
uso del hilo dental requiere, es cierto, un cierto entrenamiento, pero
su utilización resulta muy recomendable después de una gran comida. En
cualquier caso, como mínimo conviene repasar el espacio entre los
dientes con el hilo por las noches. Si no sabes hacerlo bien o no tienes destreza, acude a tu consulta y pregunta a tu dentista o a la higienista.
"En
un principio es normal que sangre porque ni dominas la técnica del hilo
dental y obviamente como no lo has hecho anteriormente, hay mucho que
sacar y limpiar", afirma el Dr. Gómez. Otra cosa es que el sangrado sea
continuo durante muchas semanas. En ese caso habrá que visitar al periodoncista.
Como todo en la vida, el exceso no es bueno. Y eso incluye la higiene bucal. Aunque las campañas de prevención de enfermedades orales sean enfocadas en el cuidado diario con la salud de la boca, hay que tener en cuenta que las medidas propuestas no deben ser aplicadas excesivamente. Cepillarse los dientes muchas veces y con mucha fuerza, por ejemplo, puede dañar las encías y dejar las piezas dentales desprotegidas. Además, algunos compuestos de los enjuagues bucales suelen ser más perjudiciales que beneficiosos para la salud oral.
Utilizar enjuagues bucales en exceso:
Aunque el enjuague bucal deja el aliento fresco, algunas fórmulas son
más perjudiciales que beneficiosas para la salud en general si las usas en
exceso. Los ingredientes de los enjuagues bucales varían, pero algunos
contienen altos niveles de alcohol, entre un 18 y 26%. Esto puede
producir una sensación de ardor en las mejillas, los dientes y las
encías, y hasta ocasionar intoxicación si se ingieren o consumen sin
criterio. Aquellos que contienen bicarbonato de sodio son bastante
utilizados para limpiar los dientes, pero si permanecen mucho tiempo en
la boca pueden desgastarlos. Además, los enjuagues bucales con clorhexidina pueden producir pigmentaciones marrones en los
dientes y lengua, posible aparición de hongos bucales y descamación de
la mucosa oral cuando son usados en exceso.
Demasiado uso de blanqueadores dentales: El uso exagerado de productos blanqueadores
tanto caseros como comerciales puede producir efectos dañinos en las
piezas dentales. Las pastas blanqueadoras y demás productos químicos
cuando son usados en exceso suelen desgastar los tejidos de la estructura
dental, como el esmalte y la dentina. Estos daños dejan los dientes
expuestos y facilitan la entrada de bacterias en la cavidad oral.
Además, esa molestia es irreversible y sólo puede ser restaurada con
técnicas restauradoras en un dentista.
En estas fotos os enseño lo que uso habitualmente, cepillo eléctrico Oral B todas las noches, cepillo manual por el día, y llevo uno en el bolso porque suelo comer fuera de casa.
Mi recomendación es ir al dentista como mínimo una vez al año a revisión, y en el caso de los niños cada 6 meses. Una limpieza bucal es recomendable una vez al año, y en el caso de ser fumador o un paciente periodontal (cada 6 meses).
Estudios recientes indican que, aunque no sea un sustituto del hilo dental, la manzana brinda algunos beneficios: protege los dientes, mejora la circulación de la sangre en las encías y regula el pH de la boca, reduciendo la formación de placa bacteriana.
La
manzana posee gran cantidad de pectina, una fibra soluble muy
beneficiosa no sólo para mejorar los problemas gastrointestinales, sino
también para proteger contra la contaminación ambiental, pues elimina
los materiales pesados del cuerpo, tales como el plomo y el mercurio. En cuanto a su acción en la boca, la manzana actúa limpiando la superficie de los dientes y reforzando las encías.
La
ingestión diaria de esta fruta no asegura que uno esté libre de sufrir
problemas dentales, pero ayuda a mantener los dientes y encías fuertes y
limpias. Además, la manzana tiene propiedades bactericidas, las cuales
ayudan a eliminar las bacterias que pueden atacar las piezas dentales.
Los
beneficios son muchos no solamente para la salud bucal, sino para la
salud en general. Algunos científicos atribuyen al olor de la manzana un
efecto relajante que ayuda a bajar la tensión. Otros estudios afirman
que esta fruta también permite reducir el riesgo de cáncer, hipertensión
y enfermedades cardiovasculares.
Sus compuestos bioactivos, tales como los elementos fenólicos
(flavonoides), contribuyen con la reducción del riesgo de cáncer de
pulmón en hasta un 50%.
¿Y
ahora? ¿Ya estás convencido de que consumir por lo menos una manzana al
día te ayuda a lucir una sonrisa más brillante? Sin embargo, no debes
olvidar que la manzana contiene azúcar y ácidos, así que nunca será una
sustituta del cepillado. Los hábitos saludables y la buena higiene bucal
son fundamentales para vivir más y mejor.
Espero que os haya gustado mi recordatorio sobre salud oral, son recomendaciones que no van nada mal y que no se nos pueden escapar en nuestro día a día.
UNA BUENA SALUD EMPIEZA POR UNA BOCA SANA
Os deseo mucha salud
BESITOS
PIMPA
¡Me ha encantado la entrada! La he leído enterita!! Y he aprendido cositas nuevas como por ejemplo no ponerle la capucha al cepillo siempre. Yo no uso eléctricos, no me gustan. La limpieza es importantísima yo voy siempre en diciembre jaja la verdad es que en temas bucales nunca me descuido solo alguna vez que igual por pereza o prisa no paso el hilo dental, pero bueno con frecuencia lo hago.
ResponderEliminarMuy buena entrada además importantísima en nuestra vida diaria.
Besitos!!!
Pues los cepillos eléctricos son perfectos.
EliminarMe alegro de q te haya gustado y hayas aprendido cositas...
Besitos
Un post muy interesante y completo.
ResponderEliminarUn besote
www.asiveolamoda.blogspot.com.es
Me ha encantado!!
ResponderEliminarMuy interesante .Yo me los cuido bastante ,tengo las encias muy delicadas y lo del hilo lo llevo mal.Bss Gema
ResponderEliminarCon cuidadito y pasándolo de vez en cuando mantendrás tu boca perfecta.
EliminarBesitos Gema
Que fantastica!! Adoro estas Pimpa clases jiji das mucha informacion, esta semana estoy muy liadilla y te puedo escribir poco ohhhhh!!! Gracias wapetona por poner una sonrisa diaria!!!
ResponderEliminarJaja.... gracias Vanesa, me alegro de q te gusten mis clases de vida saludable.
EliminarQue pases buena semana
Un besazo
Pero que post más interesante el de hoy, tomamos nota, jeje. Muchos besosssss
ResponderEliminarJijiji.... tú tienes la lección bien aprendida ehhh??? jeje.
EliminarTe echo de menos un montón!!!!
Muchos besotes.
Me has recordado que hace un montón de tiempo que no como manzanas, y eso que me encantan! :) Buen post, muy interesante, algunos datos no los conocía!!! Yo uso eléctrico y estoy bastante contenta pq además tiene el raspador.
ResponderEliminarUn beso guapa!
Lucia Gallego Blog